En
@Comounlugar
apostamos a que la cultura sea pública porque, al compartirla, multiplica su valor. Acá el PDF de El camino, mis versiones del Tao Te Ching, que compuse en medio de un incendio personal.
Todo el mundo sabe que Marie Kondo está detrás de esa millonaria conspiración para capitalizar colchones, tambores, refrigeradores, estufas, lavadoras, microondas o algo de fierro viejo que vendan.
Tuve la alegría de traducir la ponencia con la que Judith Butler aceptó ayer el doctorado honoris causa de la UNAM, sobre temas que siento importantísimos para entender el presente: el juicio, la libertad y la solidaridad ☯️
Acá, el link a Google Docs:
Qué hermosa es la expresión *it grows on you* del inglés: algo que al principio no te gusta demasiado, pero que va creciendo por dentro hasta que termina encantándote.
Sólo para contarles que, después de trabajar en cultura como un poseso durante los últimos casi 20 años, el 99% de las veces gratis o por muy poco dinero, hoy empecé un trabajo grato, estimulante, bien pago y alineado a mis valores. Estoy feliz.
La tomé de la mano hasta que se me durmió la mía. Le di un beso en la frente. Trató de decirme algo y no pudo. Yo tampoco pude decirle nada: cualquier cosa hubiera sido redundante, y ella detestaba las redundancias. Ninguna despedida es la mejor, pero pude despedirme. Gracias.
El dolor es enorme, enorme, enorme. Pero elijo observarlo y dejar que me atraviese con curiosidad y sin miedo. Del otro lado está el amor de ella, el de ustedes, el mío. Son el mismo amor. Sigamos cuidándolo.
Gracias.
¿Y si hacemos una maestría gratuita o muy barata de escritura creativa en español por Zoom, buscando micromecenazgos, y aprovechando el montón de talento latinoamericano precarizado que hay por ahí?
Mamá tiene una neumonía por COVID y está cuidada con oxígeno, cortisona y antibióticos. La fiebre bajó y, con el tanque de O2 la saturación se mantiene en niveles aceptables para su condición. Está de buen ánimo y con fe de que el cuadro irá cediendo. Gracias por el cariño.
Encontré este poema. Hoy hace un mes💔
EL COMITÉ INTERVIENE (ANDREA COHEN)
Le cuento a mi mamá
que me dieron el Nobel.
¿Otra vez?, me responde.
¿En qué categoría?
Es un jueguito al que jugamos
siempre. Yo hago de cuenta
que soy alguien importante.
Ella, que no está muerta.
Mi poema favorito de William Carlos Williams:
secom
pran
colchó
nes
tambó
res
refrigera
dores
estú
fas
lavadó
ras
micro
ondas
oálgode
fierroviejo
quevén
däan
Amigues, parte del día de mamá. Ayer se descompensó y, amén de intubarla, la pusieron en coma farmacológico boca abajo. Hoy tuvo una pequeña mejoría y la pusieron boca arriba.
Gracias al personal de Cuidados Intensivos del Sanatorio Güemes y a ustedes por el amor 💚🫁
Descreer del amor romántico como norma reguladora de un proyecto vital sostenible no implica restarle entidad a la experiencia extática, narcótica y a veces en extremo feliz que lo acompaña.
Contemplando la muerte de mamá, que no deseo ni elijo, pero que no puedo evitar imaginar, siento algo inusitado. No hay sujeción al pasado -no hay culpa- ni al futuro -tampoco ansiedad-, ni ilusión sobre el presente —no hay negación posible. La libertad seguro se parece a esto.
El duelo -me parece- tiene algo de entrenamiento físico. Entre oleada y oleada, qué lindo permitirse todo lo que te ayude a recuperarte para la próxima. Todo lo que hace bien, y que ahora se siente extrañamente nítido: la comida, el sexo, la risa.
Hoy es un día perfecto para mendigar cariño en redes sociales: me quedo sin trabajo en un mes y sin visa en tres; mi padre está internado esperando cirugía a corazón abierto; y, para colmo de males, cae agua sucia a raudales del vecino de arriba.
Hay cierta libertad, por otra parte, en sentir que un dolor de semejante magnitud e intensidad te puede atravesar sin destruirte.
Libertad y humildad, que tal vez sean lo mismo.
Oficialmente fuera de NYU y de la academia yanqui, instituciones deleznables y pobladas de hipócritas que se sacan selfies en marchas y después pisotean a sus estudiantes, público cautivo y mano de obra barata.
Pobre pero libre: ahora, a imaginar sin fingir pleitesía.
El dolor te da una inmensa claridad y después te nubla la vista.
Por eso es el estado a evitar por definición.
Por eso no hay que dejar de permitirse experimentarlo cuando es inevitable.
Acaba de salir el poema de hoy, el segundo de nuestra semana dedicada al Tao Te Ching, un –digamos– libro muy cercano a mi corazón. Me está costando elegir sólo siete.
Por su neumonía bilateral asociada al COVID, los niveles de saturación de mamá siguen en baja. Ahora está con máscara de oxígeno, y si se mantiene la tendencia descendente la van a intubar y pasar a terapia intensiva. A pesar de este escenario, tenemos fe y templanza. Gracias 💜
Yo sigo igual, dejándome atravesar por el dolor inmenso, pero también por el éxtasis, que es este ensayo (des)controlado de libertad que es mirar a los ojos a la muerte, sin miedo. Así me enseñó Indiana, que es mi mamá y mi amiga.
Gracias a La Dra. Carla Garay, de la Unidad de Cuidados Intensivos del Sanatorio Güemes, por la claridad y la empatía. Y gracias a todes ustedes por el amor y los poemas.
Por cierto, si me preguntan: estoy quebrado.
Abrazos (2/2).
Amigues, los ejercicios de respiración no surtieron el efecto esperado. Mamá ya está intubada y conectada a un respirador. Amén de la neumonía bilateral por COVID, su cuadro es especialmente complejo por la leucemia linfocítica proliferante que trae de base (1/2).
Trato de salir del charco de desasosiego *haciendo algo que me guste* y, por supuesto, encuentro la facultad del gusto apagada por completo. Me irrito. Me recuerdo que, ante el dolor, la voluntad y el deseo se sueltan la mano. Espero, dejo de esperar. Estoy.
A los 41 años y medio, a los nueve meses de la muerte de mamá, puedo decir -porque la muerte de la madre es la muerte del yo- que al fin dejo atrás el dolor de unos traumas muy profundos.
Esto es por todes les chiques que pasamos por abusos 💪
Mirá, mamá: sin madre.
Gracias.
Sin dudas, mi poema preferido de la década:
Se compran
colchones
tambores
refrigeradores
microondas
estufas
lavadoras
o algo de fierro viejo que vendan.
Nunca había imaginado que algo –y menos el dolor– pudiera ser intenso y extenso a la vez.
Ando por el mundo como si se me hubiera disuelto la piel: el menor roce me arde, me irrita, me enoja.
En los buenos momentos, me conformo con el privilegio de observar.
Acaba de salir el poema de hoy, el sexto y penúltimo de nuestra semana Tao Te Ching. Es el LXXVIII, porque todes necesitamos más ternura.
¿Me cuentan qué les pareció?
Me atravesó tu ausencia, como atraviesa un hilo
el ojo de una aguja. Y todo lo que hago
está cosido con ese mismo color.
R.I.P. W.S. Merwin (1927-2019).
Quienes me conocen saben que hace años que no lloro, algo de lo que estoy lejos de enorgullecerme.
Acabo de poner punto final a mi tesis de doctorado. Fueron seis años larguísimos, con momentos hermosos y otros muy difíciles.
Ahora sí: acá vienen las lágrimas. Gracias.
Siento un dolor gigante, que a menudo me explota desde el vientre y me atenaza el pecho.
Cuando pasa, la calma es como un éxtasis: todo lo siento nítido, hermosísimo.
Me dijo mi amiga María: son como contracciones.
Pero al revés, creería.
Tuve la enorme fortuna de traducir esta ponencia de Judith Butler. (Es un detalle muy menor en relación con la urgencia y profundidad de su pensamiento, pero no me dieron crédito: lo menciono porque es importante que se reconozca a lxs traductorxs).
Lo que llamo poesía es un uso intenso, crítico y gozoso de la lengua, una tecnología de la palabra. Y, si me apuran, de cualquier sistema de símbolos común, gratuito e imposible de privatizar.
Me acuerdo, con amor y alegría, de la última vez que nos fumamos un porro con mamá, con Indiana; y de la hermosa charla que tuvimos. Sentí ese mismo amor y esa misma alegría -aunque hay dolor- ahora que editaba el retrato que le tomé ese día.
(El 16 se cumple medio año 🫁💚)
Sí, Maradona cometió delitos, varios además con agravante de género. Cuando lloramos –y mucho– su muerte no celebramos *SU* falta ni la justificamos. Lamentamos –y mucho– la pérdida de un nosotrxs imposible, hecho de mil contradicciones, que se encarnó en su cuerpo de mutante.
Amigues, parte de esta mañana de mamá. La saturación volvió a bajar y la última vez que tuvimos comunicación le estaban haciendo ejercicios de respiración para ver si podían evitar intubarla. No bien tenga noticias, vuelvo a comunicarlas. Muchas gracias por el amor.
ESTO ES LO QUE TENGO HOY (EMILY DICKINSON)
Esto es lo que tengo hoy –
y también mi corazón –
Esto, el corazón, los campos –
y los anchurosos prados –
Vos contá – por si me olvido
para saber cuánto suma –
Esto, el corazón y todas
las abejas de los tréboles.
Acaba de salir el poema de hoy, enhebrado al de ayer por la palabra *escuchar*. Es del francés Henri Meschonnic, poeta, traductor del Antiguo Testamento y teórico del ritmo.
¿Me cuentan qué les pareció y qué palabra les queda repiqueteando?
TAO TE KING, IX (LAO-TSE)
Llenar lo que está lleno lo vacía.
Afilar lo afilado desafila.
Acumular implica custodiar.
Si llegaste a ser alguien, no sos nada.
Hacer y retirarse es el camino.
La pandemia, cuya manifestación aguda es una crisis respiratoria, afecta especialmente a las comunidades más vulnerables. El asesinato por asfixia de
#GeorgeFloyd
a manos de la policía de Minneapolis es una perversa puesta en acto de ese entramado de violencias estructurales.
(Por cierto, si llegara a interesarles, en mi linktree están los PDFs de todos mis libros disponibles para descarga gratuita.
La cultura no es un bien escaso: multiplica su valor al compartirse.)