Delfina Celichini
3 years
Sumergida en mis pensamientos críticos, el colectivo me depositó, en un acto de espabilamiento azaroso, en la puerta de un ex dpto -el primero que habité cuando llegué a la capital- en el que fui muy infeliz y en el que deseé, cada día que pasé ahí, tener la vida que tengo hoy.