Amante -y crítico- de los medios de comunicación y la cultura popular. Irónico, pero solo cuando río. Aguilucho dos temporadas al año. Oigo cumbias y a Sabina.
Tuits que anhelo:
-Inician distribución de vacuna contra COVID-19 en El Salvador.
-Personal médico aplaude a último paciente salvadoreño en ser dado de alta.
-Ayer no hubo ni un solo muerto.
-Vuelve el fútbol, regresan los conciertos, podemos ir a la playa.
Pronto, ojalá.
Un podium en primer plano, una tragedia al fondo. A esto me refiero cuando insisto en que el Gobierno mira todo con ojos de show: utilería, escenografía, iluminación. Es decir, con enfoque electorero, de imagen.
Este país debería hacer algo con los deportes relacionados con playa y agua. El talento -como el surfista y los de fútbol playa- es innato. Imaginen si se les apoyara más y desde pequeños.
“Condeno el ataque y los asesinatos; vamos a perseguir a los culpables, sean quienes sean. Me solidarizo con las víctimas y el FMLN”
El tuit que no leerán esta noche.
El mar y la flecha. El bronce líquido y el arco de oro. El Salvador que no son las maras ni los ex presidentes corruptos. El otro El Salvador, el bonito.
Parte de la culpa la tienen ARENA y el FMLN. Gobernaron tan mal que dieron la apariencia de que cualquier futuro sería mejor. Y mucha gente así lo creyó. Y mucha gente así lo sigue creyendo. Y acá estamos, al borde de que 5 años se vuelvan 10. Quizás más.
Duda:
PNC capturó a varios por violar cuarentena domiciliar. No explican el contexto.
No han explicado cómo uno -si es designado familiar para compras- se identificará ante autoridades.
¿Cómo, entonces, puedo estar seguro de que no me detendrán por ir a comprar?
Falta info.
Guion
8:30 aún no inicia
8:40 aún no
8:45 llamado a cadena
8:50 entra; ministros de pie
8:52 vienen 2 semanas más críticas
8:55 video de terror internacional
9:00 Dios nos perdone
9:10 crítica a país vecino
9:20: diputados culpables
Mañana: nueva medida que no avisó en la cadena
A ustedes les puede caer bien o mal Fernanfloo o reprocharle que no tenga un particular talento para el deporte federado, la música o la actuación y que su fama se base en las redes sociales; pero, hoy por hoy, deben reconocer que es uno de los salvadoreños más famosos del mundo.
Milagro Navas está jugando en la cancha donde los de Nuevas Ideas se sienten locales: el bullying digital, el cachondeo, los posts troleadores. Y les está ganando por goleada.
La Ministra decidió gastarse $8,000 dólares,(con cotización en mano lo podemos demostrar), para que en nuestro cierre de campaña estuviera la N de
#Navas
muchas gracias lo pasamos genial 😍🥰
#LaReynaDelEste
Las cuentas que revelan la supuesta amante del religioso son falsas, pero a la presentadora de tv ya la estigmatizan de fácil y ya hay memes acabándosela. Qué fácil es joder la reputación de alguien solo porque es famosa y creemos cool denigrarla. Eso no da orgullo en este país.
Una enfermera en bicicleta, según el gobierno, es un ejemplo de sacrificio.
Para mí, es el ejemplo de un gobierno que no le provee lo necesario a quienes él mismo llama “héroes”.
Yo digo que arreglar esta carretera es más importante que un estadio nuevo, unos juegos mecánicos en la playa y un asfalto pintado de azul en San Benito. ¿Hasta cuándo seguirán muriendo personas en
#LosChorros
?
¿De qué trata “Guasón”?
De un payaso con problemas mentales que se vuelve viral gracias a los medios y que se convierte en líder de un pueblo harto de los gobernantes tradicionales.
Me encantó la película.
Fontaneros bajo de agua, electricistas underground, estilistas clandestinas, mecánicos camuflados. Clientes que los buscan en un inframundo de servicios hoy secretos.
No es que la gente quiera morir. Es que quiere dinero para comer y vivir; y ahí afuera necesitan sus servicios.
Puede que las alertas de Nayib sean ciertas, que en realidad estemos en el peor momento de la pandemia. El problema es que ya sus tuits dan risa en lugar de alarma. Él solo se fue quitando seriedad. Hoy cuesta creerle. Y eso es malo para el país: no tomarte en serio al presidente
En Canal 4 no narran partidos. En Canal 4 adivinan jugadas: “Lo decíamos”, “Ya lo platicábamos”, “Lo habíamos adelantado”, “Te lo dije”, “ Lo analizábamos en el entretiempo”. Pareciera que no tienen más comentarios que lanzar frases obvias que, luego, en efecto, ocurren.
“Crecí donde las calles eran de lodo cuando llovía
Donde dos piedras trabajan en la portería
Donde la coca se toma en bolsa con pajilla...”
Esta debería ser ya la número uno en todas las radios. “Mi tierra”, de The King Flyp.
El Masferrer:
Ahí donde lloró Norman por el nailon, se estrelló un Ferrari rompecaderas y el alcalde actual juega a ver quién la tiene más grande.
El dinero maldito -diría el escritor que le dio su apellido al redondel-; la política, también.
Ni la ortografía de un Uber, ni la resaca post LuisMiguel en el Mágico, ni los pleitos olor a crayón por la toma de posesión, ni el debate sobre Fito y la Selecta van a devolverle la vida a esa niña que asesinaron en este país de escándalos en redes sociales y muertos en la calle
Entiendan que los de acá somos burbuja. Que la familia en una champa en Caluco no tiene Netflix; que en Polorós los niños no juegan TikTok y que hay señoras en Cinquera que no ven a Yuya para maquillarse porque no saben de YouTube y deben salir a vender pan.
¡Usen otros canales!
Se suspenden las clases online porque no todos tienen computadora bonita, internet potente, techo de duralita y cuatro paredes calientes. A algunos, el agua lodosa les morderá los pies y otros no dormirán pensando en esa montaña porosa que duerme detrás.
Más empatía, por favor.
Si me voy por la Panamericana a San Miguel, luego busco al norte hacia Honduras, lo cruzo de regreso buscando rodear El Salvador para entrar a Guate y luego ingreso por Metapán hasta llegar Santa Ana... bien me ahorro el tráfico de Los Chorros y todavía llego antes.
Quiero creer que quienes le celebran la foto como mujer a Nayib son troles. No creo, es inconcebible, en serio, que alguien lo crea divertido en medio del peor momento de la crisis, de hospitales rebalsados, de conocidos muriendo, de paranoia noticiosa, de estrés traumático.
Cualquier loco un día se nos cruza en el camino, nos ve un color diferente, se baja y nos dispara. Cualquier loco. A cualquiera de nosotros. Cualquier día.
Qué miedo. Qué frustración. Qué rabia.
Sí, algunos de nosotros:
-Estamos preocupados por el virus y tomamos medidas preventivas
-Queremos que la gente trabaje
-Nos molesta el berrinche y actitud autoritaria de Nayib
-Nos molesta la corrupción FMLN/Arena y su falta de liderazgo actual
Una cosa no excluye a la otra.
Perder así, atacando a México en Copa de Oro, es mucho más digno que lo que hacían aquellos amañadores que se iban rebalsados de goles -y dinero- y llenándonos de vergüenza.
Imaginen lo afortunado que somos de amanecer en una cama y bajo un techo y no removiendo tierra, buscando un hijo o abrazado por un ministro haciendo campaña.
Anda un audio en WhatsApp que cuenta todo el supuesto recorrido (pueblo por pueblo) que habría hecho el afectado.
Cuestionen: ¿Quién es la voz del audio? ¿Cómo sabe esa información? ¿Cómo sabemos que no está inventado o solo reproduciendo lo que oyó sin pruebas? Usemos la lógica.
Qué envidia, ticos: miren cómo cada grupito -que supongo son amigos o familiares- está debidamente separado del otro. Acá dicen 30 por ciento de aforo y todos se apiñan en el mismo sector. Ah… y no silban al himno rival.
Pero viva el verde olivo y abajo la educación, ¿verdad?
Es raro. Es raro ir a tus 40 años a un concierto de los artistas que fueron el soundtrack radial de tu adolescencia. Es raro porque hoy tienes hipertensión, calvicie y una panza acumulada como heridas de guerra; y sin embargo, estás ahí, saltando como púber y soñando que es 1993
Ya en frío:
El simbolismo de este día es potente. Muchos mirábamos con envidia-deseo a los guatemaltecos por su organización. Hoy, por fin, ocurrió acá. Quizás no se logró algo palpable, pero se han construido mensajes, unificado discursos y demostrado resistencia.
Algo cambió.
La Selecta es una ibuprofeno: sabemos que nos jode los órganos; pero la consumimos porque, por lo menos, nos hace quitar temporalmente el dolor de patria, el empacho de política y la hinchazón de violencia.
¡Viva el fútbol!
#ArribaConLaSeleccion
Llueve. Nos inundamos. Estamos jodidos por una pandemia. Muchas familias tienen frío, hambre. Y sin embargo, miembros del Ejecutivo y diputados siguen jugando al héroe santo y al villano maldito, achicándose como machos pubertos o pintado de color político la tragedia.
Tristeza.
El director de la Policía Nacional Civil -¡civil!- luce un uniforme verde olivo, tipo militar. Esto podrá ser solo un símbolo, pero es uno cargado de historia y que los Acuerdos de Paz, se supone, se encargaron de sepultar.
En 30 días, supimos quién le pagó el vuelo a Osiris; las algas en el agua ahogaron a dos funcionarios; el Salón Azul se volvió verde olivo y destiñó una imagen que parecía sólida; y recusaron al comisionado buena onda.
Qué ironía: la luna de miel terminó en el mes del amor.
La solicitud para destituir a Nayib solo ha servido para soplar el carbón y avivar la llama de su narrativa de “ellos malos, yo bueno”. Le ha dado alas de mártir y hasta le ha permitido tener un argumento contra el 9F de 2020.
Mala jugada política y comunicacional.
De cierta forma, el taxi en movimiento es el 2020 llevándose las vacaciones, el fútbol, los amigos, la playa, las celebraciones familiares. Nosotros, por otro lado, somos esa persona encima que se aferra a él, intentando frenarlo sin una pizca de éxito.
Vivimos en una metáfora.
“Esos que critican al presidente, ¿dónde estaban para la masacre del 32? Ahí no los vi tuiteando. Solo critican cuando les conviene”.
Así se leen algunos.
Se equivocó Nayib Bukele al meter militares a la Asamblea con aire autoritario.
Se equivocaron los diputados que aprobaron esa viciada ley de reconciliación.
Ningun trol -de cualquiera de los dos bandos- es capaz de escribir las dos oraciones juntas. Así puede identificarlos.
Que nosotros -usuarios de Twitter- tengamos conexión, sepamos usar google y navegar por sitios web no significa que todos los salvadoreños puedan. Veo gente burlándose de quien ya fue por los $300 y no averiguó antes en internet si ya se podía.
Un poco de empatía nos hace falta.
Fuera de broma: la capacidad de Nayib de incidir en la cultura popular es digna de estudio. Solo menciona “cluster” y nacen memes, gifs, stickers y pronto, seguro, canciones.
Nada de eso impacta en las políticas públicas, pero a él le ayuda a construir su imagen cool y popular.
Es hora de estudiar a los denominados influencers de redes sociales salvadoreños. No desde el marketing, como suele hacerse, sino desde un enfoque cultural. Me sorprende cómo estas neocelebridades (¿?) con miles de seguidores generan tanta antipatía en otros tantos. Leo hipótesis
No es fácil ser diputado, modelo de Marlboro, protagonista de "Barato", actor de reparto en "La dueña", paseador de turistas en El Majahual y agente de la Politur; y todo por el mismo sueldo. Comprendan.
Después de orar, no olviden meterse a su cuenta de Twitter a insultar a los que no apoyen al mismo político que ustedes.
Días de oración nacional son pocos. Días para que se te salga el demonio son 365.
Retuit si primero buscan los tuits de
@MOISESURBINA
antes que los de cuentas oficiales.
El que sabe se divierte. Aunque la tormenta, de divertida, nada.
Es triste que pocos hayan recordado que hace 30 años falleció uno de los cantantes salvadoreños más populares: el intérprete de “Mentiras” y fundador de Compacto, Fredy Zelada.
Pero no vaya a ser el aniversario luctuoso de un mexicano…
Acá algo que escribí en LPG años atrás:
Según este hilo: El Salvador está lleno de huevones, vivianes, explotadores, clasistas, fanáticos y corruptos. Tenemos de héroe a un futbolista drogo. Además, escasa oferta cultural, turística y gastronómica; y nuestras ciudades son desordenadas y caras.
Curiosa autopercepción.
Si Elon Musk nos arruina Twitter, ¿para dónde nos vamos?
¿Facebook? Mucho Piolín y hermanos lejanos enamorados de la N. ¿Instagram? Mucho Starbucks y playita. ¿TikTok? No me hago bailando como Yanira. ¿OnlyFans? Pendiente, ahí.
¿Dónde nos vemos, pues, si esto pierde su alma?
¿Se imaginan un Shark Tank El Salvador? Piensen en un Poma, un Kriete, un Dueñas o un Simán ofreciendo billetes por emprendimientos locales.
TCS, ahí les queda la idea.
Diputados defendiendo churros nutritivos, presidentes recetando medicinas y políticos proyectando fechas de reducción de casos.
En esta crisis, faltaron argumentos científicos y sobraron charlatanes.
Así nos va.
Comprendo la urgencia, pero, a largo plazo: ¿quedará un hospital junto a un museo? Luego, por inercia, vendrán clínicas, farmacias. ¿Quedarán entre bares y hoteles? ¿Y cuando vuelva la normalidad y vengan conciertos y ferias?
Los planificadores urbanos también debieron ser oídos.
Así nos colaron la noticia del año:
Hablemos de la Selecta. Hablemos de la Selecta. Hablemos de la Selecta. Hablemos de la Selecta. Habilitan la reelección presidencial. Hablemos de la Selecta. Hablemos de la Selecta. Hablemos de la Selecta. Hablemos de la Selecta.
¿Captaron?
La encuesta LPG le da más del 90% de aprobación a Nayib. Excelente encuesta.
La encuesta LPG dice que más del 50 por ciento de la población cree que el país está mal. Panfleto vendido.
Bienvenido al maravilloso mundo del borreguismo.
Aún recuerdo cómo la gente amaba a Funes. Era su salvador, su ídolo, el piloto que este país necesitaba para conducir por el camino del bienestar. Hoy vive en Nicaragua, atrapado, estrellado como un Ferrari.
El despertar será una pechada de bota de soldado para muchos. Será duro