Delibes, Nabokov, Gómez Dávila, Borges, Chesterton, Vargas Llosa, Havel, Solzhenitsyn, Evelyn Vaugh, Graham Green, Csezlaw Milosz, Jiménez Lozano... Lo peor es el empeño constante en hacer SU política con LA literatura. Tienen que embarrarlo todo de odio y de ignorancia.